La Audiencia Provincial de Toledo juzga el próximo martes a dos reclusos del centro penitenciario ‘Ocaña I’ por un delito de tráfico de drogas, para los que la Fiscalía pide cuatro y tres años de prisión y multas de 650 euros.
Según el escrito de acusación del Ministerio Fiscal, al que ha tenido acceso EFE, en diciembre de 2022 uno de los acusados entregó a un funcionario del centro penitenciario 16 papelinas que guardaba en su celda y que contenían 0,54 gramos de cocaína y 0,06 gramos de heroína, que le habían sido proporcionadas por otro interno.
La Fiscalía ha argumentado que los hechos son constitutivos de un delito contra la salud pública por tráfico de sustancias que causan grave daño a la salud, y con la agravante de su distribución en un centro penitenciario.
Para uno de los acusados pide cuatro años de prisión y para el otro tres años, por la atenuante de haber confesado los hechos, así como una multa de 650 euros para cada uno de ellos.