El primer Congreso de Sindicatos de Inquilinas, celebrado este fin de semana en Málaga, ha tenido como resultado la creación de una confederación estatal, que nace con el objetivo de bajar «drásticamente» el precio de los alquileres y con el compromiso de avanzar hacia una huelga general por la vivienda.
Esta alianza tiene como objetivo «dotar al movimiento inquilino de una herramienta política y sindical capaz de coordinar la lucha por el derecho de la vivienda en todo el Estado», según han informado este domingo sus impulsores.
La Confederación de Sindicatos de Inquilinas surge tras ocho años de historia de este movimiento iniciado en 2017, cuando se crearon las primeras organizaciones en Madrid, Barcelona, Málaga, Zaragoza e Ibiza debido a la subida del coste del alquiler.
Este último año se han sumado nuevas sedes en Vigo, Sevilla, Cádiz, Asturias, Guadalajara, Segovia, Ibiza y Formentera y hay grupos en formación en Valencia, Mallorca, Almería, Toledo y Zaragoza.
La coordinación de los sindicatos se consolidó con la manifestación del pasado 5 de abril en más de cuarenta ciudades y la campaña ‘Nos quedamos’, que busca frenar las expulsiones tras la finalización de contratos.
Alianzas con el sindicalismo laboral
Bajo el lema ‘Tenemos las llaves para bajar los alquileres. Acabemos con el negocio de la vivienda’, se ha aprobado por aclamación en el congreso la declaración de principios del sindicalismo inquilino, los estatutos y un plan de acción enfocado a fortalecer alianzas con el sindicalismo laboral y vincular la defensa de la vivienda con la lucha contra la carestía de la vida.
Valeria Racu, portavoz del Sindicato de Inquilinas de Madrid, ha explicado que se ha aprobado un decálogo de medidas «orientado a bajar los alquileres y acabar con el negocio de la vivienda», que incluye propuestas como instaurar alquileres indefinidos.
Además, la Confederación apuesta por recuperar los pisos vacíos, turísticos y «desviados» al mercado temporal y la creación de un parque de vivienda pública y cooperativa fuera del mercado.
Más huelgas de alquileres y una por la vivienda
Uno de los acuerdos centrales es el compromiso de la Confederación para avanzar en una huelga general por la vivienda y contra el aumento del coste de la vida.
Esta apuesta se enmarca en la extensión de las huelgas de alquileres, un fenómeno que se inició el pasado curso en Madrid y Cataluña para hacer frente a cláusulas abusivas y «alquileres disparados», y como fórmula para defender a los inquilinos de expulsiones de viviendas que están en procesos de descalificación, respectivamente.
En los próximos meses, los sindicatos anuncian nuevas huelgas de alquileres «coordinadas» en distintos territorios.
El portavoz del Sindicato de Inquilinas en Málaga, Kike España, ha apuntado la finalidad de la Confederación de «extender la desobediencia contra el rentismo», y ha hecho un llamamiento a los inquilinos a «resistir frente a las expulsiones y subidas de precios».
Inicialmente forman parte de la Confederación once sindicatos: Madrid, Cataluña, Málaga, Sevilla, Cádiz, Asturias, Zaragoza, Vigo, Ibiza y Formentera, Segovia y Guadalajara, y está prevista la incorporación de nuevos miembros en los próximos meses.