El director general de Medio Natural y Biodiversidad, Félix Romero, ha confirmado que, en caso de que se cumplan las previsiones de tormenta, la población desalojada de Robledo del Mazo y Las Hunfrías por el incendio de Sevilleja de la Jara (Toledo) podrá regresar a sus viviendas a partir de las 20.00 horas de hoy.
En declaraciones a los medios de comunicación, Romero ha avanzado que también se procederá a la desmovilización de la Unidad Militar de Emergencias (UME), pero ha puntualizado que los servicios de extinción seguirán trabajando en la zona en los próximos dos días para asegurar la extinción de los focos calientes.
Por ello, ha explicado, las autoridades recomiendan evitar al máximo el tránsito de personas para no interferir sobre el dispositivo de extinción del fuego, en el que actualmente trabajan 36 medios -ocho aéreos y 26 terrestres-, con 143 personas.
En cualquier caso, el director general de Medio Natural y Biodiversidad ha recordado que el fuego se mantiene en nivel 2, por lo que las carreteras permanecerán cortadas hasta bajar directamente al nivel 0, que previsiblemente ocurrirá esta tarde.
Romero ha destacado que, aunque la previsión es favorable, el incendio no está perimetrado al cien por cien, pues hay puntos inaccesibles para la maquinaria y los efectivos, a lo que ha añadido que «no se puede poner en riesgo a los bomberos forestales».
El fuego, declarado este viernes a las 14.30 horas, ha quemado unas 542 hectáreas, 25 de las cuales han afectado a la microrreserva de la garganta de Las Lanchas, considerada una reliquia botánica por conservar la mayor población de loro de Castilla-La Mancha.
«El incendio empezó en condiciones difíciles por la sequedad de la zona a una hora muy central, con las temperaturas muy elevadas y un componente de viento que hizo que fácilmente el fuego cogiese ciertas dimensiones», ha apuntado.
Pese a la potencialidad del fuego dadas las condiciones climatológicas que propiciaron su propagación, los servicios de prevención y extinción de incendios forestales de Castilla-La Mancha lograron contenerlo, evitando llegar así a las 3.000 hectáreas, que podrían haber quedado calcinadas de no ser por su actuación.
En cuanto al origen del fuego, los agentes medioambientales y los del Seprona investigan las causas sin descartar ninguna hipótesis: «Empezó con un foco principal y, más tarde, se detectó otro a unos mil metros de distancia. Ese indicio nos hace dejar en manos de la investigación de los incendios cuál ha podido ser la causa».
