La concejala de Obras, Noelia de la Cruz, ha mantenido este viernes la última reunión de coordinación sobre el avance de las obras de la calle Reyes Católicos dada su finalización e inminente apertura al tráfico rodado prevista para el próximo martes 27 de septiembre, tal y como anunció esta semana la alcaldesa Milagros Tolón.
A lo largo del desarrollo de esta importante reforma de la Judería toledana que se inició en noviembre de 2021, el Gobierno municipal ha mantenido encuentros telemáticos periódicos con representantes de comercios, establecimientos de hostelería y de la Federación Empresarial Toledana (FEDETO) para ir avanzando en su ejecución de forma consensuada.
En estas reuniones informativas y de seguimiento también han participado otros responsables del Ejecutivo local como el concejal de Movilidad y Seguridad Ciudadana, Juan José Pérez del Pino, o el presidente del Consejo de Participación del Casco y concejal de Empleo, Francisco Rueda.
En la cita de este miércoles, Noelia de la Cruz ha agradecido a los empresarios su paciencia, colaboración y trabajo durante estos meses, al mismo tiempo que ha destacado la importancia de estas reuniones de coordinación para el buen desarrollo de una obra de tal envergadura que se ha realizado por fases y en constante diálogo con las principales partes afectadas para causar las menores molestias posibles.
Casco Histórico de Toledo
La concejala de Obras ha explicado que este modelo de comunicación directa se fijará como permanente y definitivo para todas las obras que se lleven a cabo en el Casco Histórico como ya se hiciera en la intervención de la calle Comercio, y se está realizando con la actuación de mejora del eje Toledo Ohio-calle de la Plata-plaza de San Vicente-Tendillas.
Con una inversión de 3 millones de euros, esta reforma de la Judería toledana ha ido desde la bajada de Descalzos y plaza del Conde hasta la calle Reyes Católicos en su confluencia con la Puerta del Cambrón y bajada de San Martín. Se han renovado e instalado más de 6.000 metros cuadrados de adoquinado de granito y en torno a 3.000 metros cuadrados de baldosas.
Mientras, la superficie de calzadas y aceras sobre las que se ha intervenido supera los 9.000 metros cuadrados y una longitud lineal de un kilómetro y medio.
