Un equipo internacional de investigadores busca recuperar fósiles de animales carnívoros de hace 30 millones de años en dos yacimientos de la provincia de Cuenca, uno de ellos descubierto gracias a las obras del trasvase Tajo-Segura, que albergan, además, restos del Oligoceno inferior, un periodo casi “invisible” en la Península Ibérica.
La intervención forma parte de la tercera campaña de excavaciones en la cuenca del Loranca, en los yacimientos del Cerro Arenoso (Carrascosa del Campo), de unos 30 millones de años, y el de Valquemado (Huete), datado en unos 23 millones de años.
El grupo de investigadores lo codirige el paleontólogo conquense Fernando Blanco, investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en la Estación Biológica de Doñana, y quien ha explicado a EFE que lo singular es “la secuencia temporal” de los yacimientos de la zona, con una historia de “20 millones de años”, algo difícil de encontrar “en el mundo”.
En este sentido, Blanco ha recordado que el yacimiento de Cerro Arenoso se descubrió en los años 60 del siglo pasado durante las obras de construcción del trasvase Tajo-Segura, y que se excavó durante sólo una campaña, para luego cerrarse hasta hace pocos años.
Este enclave se caracteriza por albergar abundantes restos de carnívoros, algo “muy raro”, que representa la biodiversidad de la tierra, y que ahora intentan documentar investigadores que pertenecen al Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH), la Universidad de Castilla-La Mancha, el Museo Nacional de Ciencias Naturales, el, la Universidad Complutense de Madrid, Universidad de Alcalá, Museo de Historia Natural de Berlín (Alemania), Universidad de Cambridge (Reino Unido) y Universidad John Hopkins (USA).
Se da la circunstancia que este año la campaña, que comenzó el pasado 1 de septiembre y se extiende durante quince días, se realiza gracias a las ayudas a la investigación del patrimonio arqueológico y paleontológico de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Por ello, han podido ampliar el número de investigadores asentados estos días en la provincia de Cuenca, ha destacado Blanco, mientras recuerda periodos como el Oligoceno inferior cuando la Tierra atravesaba una transformación global.
Mientras el planeta se enfriaba, los bosques tropicales que habían dominado el Eoceno daban paso a ecosistemas más abiertos, lo que supuso “una auténtica revolución ecológica dado que muchos grupos de mamíferos desaparecieron y otros, como los antepasados de ciervos, jirafas o bóvidos, comenzaron a prosperar”.
Cerro Arenoso hace 30 millones de años
Y Cerro Arenoso, en Cuenca, datado entre 29 y 31 millones de años, conserva este momento de transición, y desde su descubrimiento ha proporcionado fósiles de gran interés científico, como los últimos “Dichobunidae” (artiodáctilos primitivos emparentados con los cerdos) y algunos de los primeros representantes de familias que aún existen hoy.
Por ello, intentan explicar cómo ocurrió esta transición y “cómo evolucionaron estas faunas que hoy en día son tan importantes para nosotros”, ha precisado por su parte a EFE Ignacio A. Lazagabaster, del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana.
El yacimiento de Valquemado, con unos 23 millones de años de antigüedad, prolonga esa historia en el Mioceno inferior, mostrando ya un paisaje faunístico dominado por artiodáctilos modernos, mientras que los perisodáctilos (caballos y rinocerontes) comenzaban a ceder protagonismo, precisa el equipo en una de sus notas científicas.
Así, los registros fósiles de ambos yacimientos permiten comprender cómo los ecosistemas del pasado dieron origen a las comunidades de mamíferos actuales.
Mamíferos como los conocidos como “dientes de sable”, los “depredadores de la época”, y otros carnívoros de gran tamaño, como los “perros-oso”, que llegan al Mioceno pero luego se extinguen, aclara durante la entrevista Blanco.
Charlas para acercar la paleontología a la ciudadanía
Estos miembros del equipo de excavación, además, divulgan las acciones que realizan en las charlas que ofrecen centro cultural El Silo de Carrascosa del Campo, para acercar la paleontología y evolución al público en general.
Esta próxima semana están previstas el martes día 9 y el jueves 11 a las 19.30 horas, mientras los paleontólogos preparan ampliar las investigaciones para comprender de forma global la evolución de los mamíferos e impulsar un proyecto con beneficios culturales y económicos para el territorio.