El Ayuntamiento de Cuenca ha difundido, como respuesta al Partido Popular, un informe de la empresa pública Aguas de Cuenca que sitúa en julio de 2017 el momento en el que se detectó la rotura en el colector de la red de saneamiento situado en el vial de acceso a la Plaza de Ronda y las Casas Colgadas, mientras que es en enero de 2018 cuando los técnicos detectan «posibles movimientos del muro» de la calle Canónigos que se ha desplomado.

Según relata el informe de Aguas de Cuenca, este servicio hizo comprobaciones en el interior del colector el día 15 de julio de 2017 y en ellas detectaron «roturas, fisuras y daños importantes», por lo que recomendaban sustituir el tramo afectado para evitar fugas de agua.
En la memoria de actuación publicada en octubre de 2017 se explica que los trabajos proyectados iban a consistir en la instalación de un nuevo colector. Según este documento técnico inicial de Aguas de Cuenca «se desconoce si existen elementos afectados por la urbanización del vial con la mera inspección del colector y al no haber realizado otros ensayos o catas en la zona afectada. No obstante, no se observan daños o deterioros en los pavimentos, lo que podría evidenciar la no existencia de oquedades o fallos en el firme bajo el colector que requieran de actuaciones importantes de consolidación y relleno».
Sin embargo, en el momento de la ejecución de la obra, los técnicos detectan posteriormente una oquedad en el firme del vial y elaboran un nuevo informe, fechado en enero de 2018, que es el que ha difundido el Ayuntamiento de Cuenca. En este omento apuntan que no puede garantizarse «la estabilidad de la losa-pavimento actual», por lo que proponen que se actúe no solamente en el tramo del colector sino en la zona donde existan deficiencias «y que precisan de consolidación y relleno».
Según este documento, fue el 9 de enero de 2018 cuando se encontró «una importante oquedad bajo la solera del vial» que provoca la paralización de la obra en el colector, que se había iniciado el día 5 de enero.
Aguas de Cuenca detecta durante el inicio de estos trabajos «deficiencias visibles del vial en dichas zonas, con rotura de losa-material de acabado, rebajes y posibles movimientos en el muro» el Ayuntamiento decidió instalar testigos de controlar para comprobar si, efectivamente, se estaba produciendo un desplazamiento.

La empresa de aguas explica en el documento que «desconoce» las causas del «importante socavamiento en la zona afectada» y señala que «tienen que realizarse estudios del origen del hundimiento del firme del vial y que aparentemente podrían repetirse al igual que en la zona objeto de este informe en los tramos contiguos».
El informe concluye que la actuación de Aguas de Cuenca se limitará a restablecer el funcionamiento del colector y reparar las zonas socavadas del vial, pero avisa que existen deterioros en las zonas contiguas que deben ser analizados «para determinar la urgencia y envergadura de la reparación».
El informe de 2019 divulgado por el Partido Popular, señala entre las causas del derrumbe de Canónigos las filtraciones de agua, a las que pudo contribuir el colector averiado.
El Partido Popular, por su parte, se ha remontado más atrás y recuerda que en el año 2015, cuando Darío Dolz era concejal de Urbanismo, se encargaron al Consorcio Ciudad de Cuenca obras de consolidación del muro que ha caído.
/Jesús Huerta/