El Museo del Quijote de Ciudad Real acogía este martes un acto simbólico cargado de identidad y reivindicación cultural: el hermanamiento entre La Pandorga y la Fiesta del Pimiento de Villanueva de los Infantes, ambas celebraciones declaradas de Interés Turístico Regional. Esta iniciativa busca tejer lazos entre dos de las manifestaciones populares más representativas de la provincia, que comparten un fuerte componente gastronómico, festivo y tradicional.
El alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares, acompañado por la concejal de Festejos, Mar Sánchez, subrayó durante su intervención la importancia de “mirar a lo nuestro”, destacando que la unión de ambas festividades “reafirma nuestro orgullo por el origen, por las raíces que nos definen y por el legado cultural que compartimos”. En su discurso, el regidor apeló a la colaboración institucional como una vía para fortalecer el desarrollo económico y turístico de la provincia: “Juntos somos más fuertes y conseguimos más cosas”, afirmó.
Cañizares recalcó que la capital debe ser “puerta y escaparate de nuestra tierra”, ofreciendo espacios donde las expresiones tradicionales de todos los rincones de Ciudad Real puedan sentirse reconocidas y respaldadas. Asimismo, valoró el hermanamiento como una oportunidad para “dotar de visibilidad a las manifestaciones que surgen del pueblo, que nacen del esfuerzo colectivo y del apego a lo auténtico”.
Durante el acto, también tomó la palabra el presidente de la Diputación Provincial, Miguel Ángel Valverde, quien felicitó al alcalde de la capital “por ejercer su papel de representación de toda la provincia”, subrayando que esta visión inclusiva “no solo se refleja en la gestión administrativa, sino en la voluntad de abrir la ciudad a todas las manifestaciones culturales que enriquecen nuestro territorio”.
Por su parte, la alcaldesa de Villanueva de los Infantes, Carmen María Montalbán, agradeció la hospitalidad del Ayuntamiento ciudadrealeño y celebró una unión que “pone en valor lo que nos une: la alegría, la gastronomía, la huerta y el folclore”. Montalbán destacó la proyección creciente de la Fiesta del Pimiento, que cada año reúne a miles de personas en torno a la cocina popular y a las Jornadas Nacionales de Folclore, consolidándose como una de las citas más concurridas del calendario cultural manchego.
El acto contó además con una amplia representación de la Corporación Municipal de Ciudad Real, así como con la presencia de los Pandorgos, Dulcineas, Damas y numerosos colectivos sociales y culturales de la ciudad, que quisieron sumarse a esta jornada de hermanamiento entre dos fiestas que comparten esencia popular. La celebración concluyó con una degustación de pisto típico de Villanueva de los Infantes y una exhibición de bailes regionales a cargo de la Asociación de Folclore y Tradición “Cruz de Santiago”, que puso el broche festivo a una mañana dedicada al orgullo por las raíces comunes y la proyección conjunta del patrimonio manchego.