El sector del melón y la sandía ha facturado 792,9 millones de euros entre junio de 2024 y mayo de 2025, lo que supone un crecimiento del 1,6% con respecto al año anterior.
Según los datos del panel de consumo alimentario del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, por regiones, Extremadura, Castilla-La Mancha y Castilla y León son los hogares donde más se consumen melones y sandías, mientras que Cantabria, Galicia, Asturias y Canarias presentan un nivel de compra por debajo de la media.
En concreto, el precio medio de la sandía y melón ronda los 1,20 euros por kilo, lo que supone un 6,4% menos que el año anterior, y está por debajo del precio medio de la fruta fresca (2,2% euros por kilo).
El informe constata que los hogares españoles siguen demandando esta fruta, ya que consumieron 663,5 millones de kilos de melón y sandía entre junio de 2024 y mayo de 2025, lo que supone un 8,6% más que el año anterior y 52,5 millones de kilos más.
De esta forma, cada español ha consumido una media de 14,16 kilos de melón y sandía, un 7,9% más que el año anterior, que equivale a un kilo más por persona y año. El gasto per cápita creció de forma moderada y se situó en los 16,92 euros por persona y año, casi un 1% más.
El consumo de sandía y melón se caracteriza por una marcada estacionalidad, entre los meses de mayo y septiembre, que coincide con las campañas de recolección.
De esta forma, el efecto de la producción y estacionalidad de estas frutas explica que la proporción del volumen comprado por los hogares sea diferente por mes y tipo de fruta. Así, la sandía concentra su consumo en los meses centrales del verano, mientras que el melón presenta una curva ligeramente más prolongada, con un consumo significativo incluso en los meses de inicio del otoño.
A la hora de comprar esta fruta los españoles se decantan por el supermercado como el canal preferido, ya que concentra el 54,5% de las compras. Entre las frutas frescas adquiridas en este tipo de establecimiento, el melón y la sandía destacan como las más demandadas. Le siguen las tiendas tradicionales con el 23,3% del volumen total y el hipermercado como tercer canal de distribución.