La región ha registrado en la madrugada de este lunes dos movimientos sísmicos de baja magnitud que, aunque fueron percibidos por algunos vecinos, no han provocado daños personales ni materiales, según ha informado el Instituto Geográfico Nacional (IGN).
El primero de los temblores se produjo a las 02:05 horas (hora local) al noroeste de Mochales (Guadalajara). El seísmo alcanzó una magnitud de 2,9 mbLg, con epicentro a 5 kilómetros de profundidad. Debido a su intensidad, fue sentido por la población, generando cierta alarma en la comarca, aunque sin consecuencias materiales.
Unas horas más tarde, a las 06:41 horas (hora local), el IGN registró otro movimiento sísmico, esta vez al oeste del municipio de Munera (Albacete). En este caso, la magnitud fue de 1,8 mbLg, con epicentro a 7 kilómetros de profundidad. Por su baja intensidad, apenas fue percibido por los vecinos de la zona.
Estos fenómenos, aunque de pequeña magnitud, ponen de relieve la actividad sísmica del interior peninsular. El IGN recuerda que los seísmos en Castilla-La Mancha suelen ser poco frecuentes y de carácter leve, pero contribuyen a mejorar el conocimiento científico de la dinámica de fallas en la región.