La consejera de Igualdad, Sara Simón, considera «incomprensible» que por sentencia judicial se haya dado la custodia de una menor que tras fallecer la madre se encontraba con la familia de esta en Sigüenza a su padre biológico, teniendo en cuenta que tenía una orden de alejamiento por violencia machista, y anuncia que van a estar «muy vigilantes» para garantizar el bienestar de esa menor.
La titular de Igualdad, que ha estado este viernes en la inauguración de un Centro de día en Apanag, ha señalado a preguntas de los periodistas que si bien respetan las sentencias judiciales, desde su departamento harán un seguimiento del bienestar de la menor porque les preocupa la niña y también porque tienen «algunas sospechas de que las condiciones no van a ser las mejores».
Todo ello mientras familiares de la madre en Sigüenza están recogiendo firmas como modo de protesta para evitar que el 31 de julio tengan que entregarla al padre, alguien que, según afirman, no ha hecho caso de la menor nunca desde el fallecimiento de la madre por causas ajenas a un caso de violencia de género.
La titular de Igualdad afirma que en este caso concreto no pueden «comprender» la sentencia. «Siempre hemos dicho que un maltratador no puede ser nunca un buen padre», ha remarcado.
La consejera tiene previsto reunirse la semana que viene con la familia de la madre fallecida, que es la que ahora se hacía cargo de la pequeña, con el fin de analizar la situación y estudiar las herramientas que hay al respecto.
«Esa decisión se ha tomado por un juez, pero al Gobierno de Castilla-La Mancha nos parece incomprensible que se le dé la custodia a un hombre que tenía una orden de alejamiento por violencia machista», remarca Simón, lamentando el dolor que ya está generando en la familia el saber que el día 31 de julio tendrán que entregar a la menor pese a que esta había conseguido tener en la Ciudad del Doncel un entorno «seguro y confortable».
Si bien desde el Gobierno regional han precisado que la pequeña no estaba tutelada por la Administración sino con su familia extensa, Simón sí ha querido incidir en que se trata de una noticia que les causa «dolor» porque va a suponer separar a la pequeña, de unos cuatro años, del entorno conocido que tenía hasta ahora para entregarla a un padre que tenía una orden de alejamiento.
Desde la Consejería de Igualdad saben que se han fijado encuentros de la menor con el padre en Guadalajara, pero según Simón, tienen información de que el propio padre no siempre ha acudido, por lo cual desconoce cuál es el interés real por reclamar la custodia de una niña «de la que no se había acordado que tenía hasta ahora».