El Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza de Castilla-La Mancha (STE-CLM) ha denunciado que en el curso 2024-2025 ha aumentado las agresiones al profesorado, tanto físicas como verbales, y se ha producido un «deterioro» estructural en la educación pública por «sobrecarga» laboral y falta de apoyo institucional.
Así lo ha detallado este jueves el responsable de acción sindical de STE-CLM, Lorenzo Alberca, junto al secretario de Organización de este sindicato, Juan Rodríguez, en una rueda de prensa donde han hecho un balance del curso escolar 2024-2025.
En este sentido, han indicado que han aumentado los casos de agresión física al profesorado, por lo que han manifestado que son síntomas de un «deterioro» estructural por «sobrecarga laboral, la falta de apoyo institucional, la precariedad laboral y la pérdida de respeto hacia el profesorado».
El sindicato ha lanzado una encuesta que hasta el momento la han rellenado 1.500 docentes de Castilla-La Mancha y refleja que un 87 % ha recibido alguna agresión verbal o física por parte del alumnado o sus familias; además, el 96 % del profesorado considera «insuficiente» la protección y apoyo por parte de la Administración educativa, mientras que el 92 % considera que su labor como docente está «muy poco valorada».
Por otro lado, han subrayado el retroceso en la inclusión educativa, ya que ha indicado que el alumnado con necesidades específicas (ACNEAE) ha aumentado un 281 % en las últimas dos décadas, mientras que los recursos para apoyos en educación infantil son «limitados».
Asimismo, han denunciado que las medidas conseguidas durante el curso se están financiando con «más recortes», por lo que STE-CLM ha afeado que se está «desmantelando» el bachillerato nocturno, la educación de adultos y las escuelas oficiales de idiomas.
Otro punto que han resaltado es el «abandono» de zonas tensionadas de la región como La Sagra y Ocaña en la provincia de Toledo, el Corredor del Henares ubicado en Guadalajara y Tarancón (Cuenca), donde han enfatizado que el crecimiento poblacional, la falta de inversión y la masificación en las aulas hacen «difícil» la inclusión.
De esta manera, el sindicato ha concluido afirmando que la responsabilidad recae en el Gobierno regional y en la Consejería de Educación, Cultura y Deportes, así como que la comunidad educativa «no aceptará más excusas ni intentos de maquillar la realidad”.
