El Gobierno de Castilla-La Mancha continúa trabajando en la prevención del tabaquismo entre los estudiantes. Una estrategia en la que resulta clave la colaboración entre las administraciones públicas.
Así, tal y como ha señalado la delegada provincial de Sanidad en Albacete, Juani García Vitoria, desde hace un año está activo un convenio de colaboración entre la Consejería de Sanidad y la Universidad de Castilla-La Mancha para la realización del programa de tabaquismo denominado “Programa Peer-to-peer de cesación tabáquica para estudiantes”.
El objetivo de esta iniciativa financiada por la Consejería de Sanidad es la capacitación del personal sanitario en materia de tabaquismo y la formación de los estudiantes de los grados de Ciencias de la Salud para la prevención y el tratamiento del tabaquismo.
En concreto, el alumnado al que va dirigida la formación es el de los grados de Medicina, Farmacia, Enfermería y Psicología impartidos en el campus de Albacete. Hasta marzo ya se habían formado cerca de cien estudiantes como “especialistas en prevención del consumo de tabaco y abordaje integral de la adicción al tabaquismo”.
Durante la apertura de las III Jornadas de Tabaquismo, celebradas en la mediateca de la Facultad de Farmacia de la UCLM, Juani García Vitoria ha afirmado que “es imprescindible atajar el problema del tabaco en las edades más tempranas”.
En este aspecto, la delegada de Sanidad, acompañada del neumólogo y director de las jornadas, Raúl Godoy, del presidente del Colegio de Farmacéuticos de Albacete, Pablo Silvestre, y representantes de la UCLM, ha recordado que desde 2006, en colaboración con la Sociedad Castellano-Manchega de Medicina Familiar y Comunitaria (SCAMFYC), el Gobierno regional desarrolla el programa “Clase sin Humo”, con el que se pretende que los escolares no se inicien en el hábito de fumar.
Estas distintas líneas de actuación, ha explicado García Vitoria, se enmarcan en el amplio Plan Respira, que contempla acciones de sensibilización a la población y un abordaje integral de deshabituación tabáquica que incorpora la terapia farmacológica financiada. Medidas que se suman al acceso a la ayuda para dejar de fumar en todos los centros asistenciales que desarrollen programas ya sean individuales o colectivos.
“La Consejería de Sanidad tiene como objetivo reducir el consumo de tabaco en la población, previniendo el inicio de su consumo y ayudando a las personas fumadoras a abandonarlo; con este fin es fundamental facilitar la formación en el tratamiento del tabaquismo tanto para profesionales sanitarios como para estudiantes de grados de Ciencias de la Salud”, ha concluido la delegada. Por último, ha animado a los jóvenes a que “generen nuevas ideas para luchar contra el tabaquismo”.
Los datos sobre los efectos adversos del consumo son elocuentes. El tabaquismo se asocia a más de una veintena de enfermedades como el EPOC, el asma o patologías cardiovasculares. En Castilla-La Mancha, con cifras muy similares a la media nacional, el 62,5 por ciento de las personas entre 15 y 64 años ha fumado alguna vez en su vida; un total de 32,5% de los ciudadanos reconoce fumar a diario.
Estos porcentajes convierten al tabaco en la segunda sustancia psicoactiva más consumida después del alcohol. Finalmente, cabe señalarse que, pese a una ligera bajada del consumo de tabaco, se ha observado un aumento progresivo de las nuevas formas de consumo: los cigarrillos electrónicos y los vapeadores.
Ante esta epidemia de tabaquismo que representa una amenaza para la salud pública, y con la idea de fomentar espacios de conocimiento y actuación, se han celebrado estas terceras jornadas en las que se han abordado diversos temas de actualidad. Con la intervención de expertos en la materia, se ha hablado de los “determinantes comerciales en salud” o “la nicotina en las redes sociales”. Una sesión en la que no ha faltado la presentación de trabajos de los propios estudiantes y una mesa redonda sobre la experiencia generada con el proyecto “Peer-to-Peer”.