Unas 4.000 mujeres de Castilla-La Mancha precisan algún tipo de protección de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado por ser víctimas de violencia machista, una «dura realidad» que ha costado la vida a dos mujeres en la comunidad autónoma en lo que va de año.
El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Francisco Tierraseca, ha aportado estos datos a los medios de comunicación tras desplegar un lazo morado en la fachada de la Delegación del Gobierno, con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que se conmemora el 25 de noviembre.
Este lazo morado lucirá durante toda la semana como símbolo de la igualdad entre mujeres y hombres y rechazo a la violencia de género y también se instalará en las fachadas del resto de las Subdelegaciones del Gobierno en Castilla-La Mancha.
Con el despliegue de este lazo morado, tal y como subrayado el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, se inicia la semana principal de actos para conmemorar el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, si bien ha reivindicado que en la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha se viene desarrollando “a lo largo de todo el año”.
Estas acciones se basan no solo en la atención a las víctimas por parte de profesionales, sino también en actividades de concienciación que llevan a cabo la Policía Nacional y la Guardia Civil, sobre todo destinados a los más jóvenes.
Asimismo, ha valorado que este año «se ha avanzado en ese objetivo gracias a la firma de dos protocolos muy importantes, con la Universidad de Castilla-La Mancha y con la Universidad de Alcalá de Henares».
A su entender, se trata de «actuaciones fundamentales», pues ha recordado que en Castilla-La Mancha «unas 4.000 mujeres tienen algún tipo de protección», porque están en peligro «todos los días, de que en cualquier momento puedan ser atacadas por sus parejas o exparejas», y ha recordado que dos mujeres han sido víctimas de asesinatos machistas en la región en lo que va de año.
«Esa es la dura realidad», ha lamentado Tierraseca, que ha advertido de que esta «es la cara más visible de la violencia de género».