La incidencia de pacientes con Enfermedad Renal Crónica en tratamiento renal sustitutivo en Castilla La Mancha se sitúa en 100 personas por millón de población, muy por debajo de la media nacional, de 141, según los datos del Registro Español de Enfermedades Renales (REER), cuyo último informe se ha presentado en el LI Congreso de la Sociedad Española de Nefrología (SEN).
Este dato supone un descenso del 14,7% respecto al año 2019, lo que sitúa a Castilla La Mancha como la comunidad española con menor tasa de incidencia y como una de las que más la ha reducido en el año 2020, según ha informado la SEN en nota de prensa.
Por su parte, la prevalencia (número total de casos) de pacientes con enfermedad renal crónica en tratamiento renal sustitutivo en Castilla La Mancha alcanza las 1.237 personas por millón, muy inferior a la media nacional, que se sitúa en 1.363, con un descenso del 3% respecto a 2019.
DATOS NACIONALES
A nivel nacional, la pandemia de la COVID-19 provocó en 2020 una estabilización de la prevalencia y un descenso en la incidencia en la ERC, lo que demuestra el impacto negativo que la COVID-19 ha tenido en el inicio de los tratamientos renales, a pesar del esfuerzo realizado por los profesionales por minimizar esa repercusión.
Unos siete millones de personas tienen enfermedad renal crónica en España, de las que 64.666 reciben tratamiento renal sustitutivo, es decir diálisis o trasplante, con una prevalencia que se situó en 1.363 personas por millón, ligeramente inferior al 2019.
Por su parte, la incidencia se redujo un 7% en 2020, situándose en 141 personas por millón en comparación con los 152 del año anterior. En total, 6.708 personas iniciaron diálisis o trasplante, el 67% de ellas hombres.
La mortalidad en estos pacientes subió ligeramente hasta situarse en el 8,3%, mientras que los trasplantes renales disminuyeron un 21%, aunque en 2021 ya se asiste a una recuperación de la actividad.
